9 de noviembre de 2014

¿Hasta donde llegaremos?

No, no me refiero al desgarro de vestiduras de los medios por la "violencia" en las marchas, mucho menos a lo que pasó en la famosa puerta de Palacio Nacional.

Hablo de algo más profundo.

Se ha dicho mucho que el cambio está en uno, que para crear un mejor país debemos comenzar por nosotros y eso es cierto.

Necesitamos apoyar a los pequeños productores nacionales, nos urge terminar la dependencia alimenticia y luchar por la autosuficiencia, es imperioso el exigir a los supermercados el que nos vendan alimentos de producción nacional.

Debemos alzar la voz por empleos dignos, bien pagados, con prestaciones, sin que se explote al empleado. Es urgente que la salud, educación y seguridad sea una realidad para todos.

Acabemos con la impunidad, con la corrupción, con la violencia.

Pero ¿cuantos serian capaces cambiar? Dejaran de mentar madres a los manifestantes cuando les hacen llegar tarde al trabajo, ya no van ir a ese café tan nice para consumir productos nacionales, dejarán ell super e iran al mercado de la colonia, denunciarán los delitos que conocen, van a comprar productos nacionales, dejarán de ver la tele, votarán las próximas elecciones, no se permitiran ser manipulados, van a leer más, darian parte de su ingreso para quienes no tienen, donarían su tiempo a una causa,...

Porque, no va a venir nadie a solucionar todo magicamente, no va a haber nadie que acabe con este mierdero si no lo hacemos nosotros.

Luchemos por un mejor país, cambiemos todo lo que haga falta para lograrlo pero también cambiemos nosotros porque si nos sigue gobernando el egoismo, la apatía, el racismo... pasaran mil gobiernos y esto cada día estará peor.

Así que, cuando levantes la voz piensa: ¿Hasta donde estoy dispuesto a llegar?

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